Chapter 11

1)AHORA bien, en la ley de Mosíah constaba que todo el que fuera juez de la ley, o aquellos que fueran nombrados jueces, habían de percibir su salario de acuerdo con el tiempo que emplearan en juzgar a los que les llevaban para ser juzgados.

3)Y el juez recibía sus honorarios según su tiempo: un senine de oro por día, o un senum de plata, que equivalía a un senine de oro; y esto de acuerdo con la ley que se había dado.

5)Ahora bien, su computación es la siguiente: Un senine de oro, un seón de oro, un shum de oro y un limna de oro;

6)un senum de plata, un amnor de plata, un ezrom de plata y un ontí de plata.

2)Así que, si un hombre era deudor de otro, y no le pagaba la deuda, se daba la queja al juez; y éste ejercía su autoridad y despachaba oficiales para que llevaran al deudor ante él; y él juzgaba al hombre de acuerdo con la ley y la evidencia presentada en contra de él; y así se obligaba al deudor a pagar lo que debía, o se le despojaba de lo que tenía, o se le echaba de entre la gente por estafador y ladrón.

4)Y éstos son los nombres de las diferentes monedas de su oro y de su plata según su valor; y los nombres provienen de los nefitas, porque no contaban según el modo de los judíos que vivían en Jerusalén; ni medían como lo hacían los judíos, sino que habían alterado su modo de contar y medir, de acuerdo con la voluntad y circunstancias del pueblo en cada generación, hasta el gobierno de los jueces que fueron establecidos por el rey Mosíah.

7)Un senum de plata equivalía a un senine de oro, y el uno o el otro valía una medida de cebada, y también una medida de toda otra clase de grano.

8)Ahora bien, el valor de un seón de oro era el doble del valor de un senine;

9)y el valor de un shum de oro era el doble del de un seón;

10)y un limna de oro equivalía al valor de todos.

11)Y un amnor de plata valía dos senumes;

12)y un ezrom de plata valía cuatro senumes;

13)y un ontí equivalía al valor de todos.

14)Ahora bien, éste era el valor de las cantidades menores de su manera de calcular:

15)Un shiblón era la mitad de un senum; por tanto, un shiblón valía media medida de cebada;

16)y un shiblum era la mitad de un shiblón;

17)y un léah era la mitad de un shiblum.

18)Éstas, pues, eran sus cantidades según su manera de contar.

19)Y un antión de oro equivalía a tres shiblones.

20)Ahora bien, era con el único objeto de lucrar, pues les pagaban según sus servicios, por lo que incitaban a la gente a motines y a toda clase de desórdenes y maldades, para tener más trabajo con objeto de obtener dinero, de acuerdo con los litigios que les eran presentados; por tanto, agitaron al pueblo contra Alma y Amulek.

21)Y este Zeezrom empezó a interrogar a Amulek, diciendo: ¿Me responderás a algunas preguntas que voy a hacerte? Y Zeezrom era un hombre diestro en los artificios del diablo a fin de destruir lo que era bueno; por lo que dijo a Amulek: ¿Me contestarás las preguntas que te voy a hacer?

22)Y le dijo Amulek: Sí, si va de acuerdo con el Espíritu del Señor que hay en mí; porque nada diré que sea contrario al Espíritu del Señor. Y le dijo Zeezrom: He aquí seis ontíes de plata; te los daré todos si niegas la existencia de un Ser Supremo.

23)Luego dijo Amulek: ¡Oh hijo del infierno! ¿Por qué me tientas? ¿Ignoras tú que los justos no ceden a tales tentaciones?

24)¿Crees que no hay Dios? Yo te digo: No, tú sabes que hay un Dios, pero le tienes más amor a ese lucro que a él. 

25)Y ahora me has mentido ante Dios. Tú me dijiste: He aquí, te daré estos seis ontíes que son de gran valor, cuando en tu corazón tenías la intención de retenerlos; y sólo era tu deseo que yo negara al Dios verdadero y viviente, y así tuvieras motivo para destruirme. Mas he aquí que por este gran mal recibirás tu recompensa.

26)Y Zeezrom le dijo: ¿Dices tú que hay un Dios verdadero y viviente?

27)Y dijo Amulek: Sí, hay un Dios verdadero y viviente.

28)Y Zeezrom dijo: ¿Hay más de un Dios?  

29)Y él respondió: No.

30)Luego Zeezrom le dijo otra vez: ¿Cómo sabes estas cosas?

31)Y él dijo: Un ángel me las ha manifestado.

32)Y Zeezrom dijo otra vez: ¿Quién es el que vendrá? ¿Es el Hijo de Dios?

33)Y él le dijo: Sí.

34)Y Zeezrom nuevamente dijo: ¿Salvará a su pueblo en sus pecados? Y Amulek contestó y le dijo: Te digo que no, porque le es imposible negar su palabra.

35)Entonces Zeezrom dijo al pueblo: Mirad que recordéis estas cosas; pues él ha dicho que no hay sino un Dios; no obstante, dice que el Hijo de Dios vendrá, mas no salvará a su pueblo, como si tuviese él la autoridad para mandar a Dios.

36)Luego Amulek le dijo de nuevo: He aquí, tú has mentido; pues dices que hablé como si tuviera la autoridad para mandar a Dios, porque dije que no salvará a su pueblo en sus pecados.

37)Y te vuelvo a decir que no puede salvarlos en sus pecados; porque yo no puedo negar su palabra, y él ha dicho que ninguna cosa impura puede heredar el reino del cielo; por tanto, ¿cómo podéis ser salvos a menos que heredéis el reino de los cielos? Así que no podéis ser salvos en vuestros pecados.

38)Luego Zeezrom de nuevo le dijo: ¿Es el Hijo de Dios el mismo Padre Eterno?  

39)Y le dijo Amulek: Sí, él es el Padre Eterno mismo del cielo y de la tierra, y de todas las cosas que en ellos hay; es el principio y el fin, el primero y el último;

40)y vendrá al mundo para redimir a su pueblo; y tomará sobre sí las transgresiones de aquellos que crean en su nombre; y éstos son los que tendrán vida eterna, y a nadie más viene la salvación.

41)Por tanto, los malvados permanecen como si no se hubiese hecho ninguna redención, a menos que sea el rompimiento de las ligaduras de la muerte; pues he aquí, viene el día en que todos se levantarán de los muertos y comparecerán delante de Dios, y serán juzgados según sus obras.

42)Ahora bien, hay una muerte que se llama la muerte temporal; y la muerte de Cristo desatará las ligaduras de esta muerte temporal, de modo que todos se levantarán de esta muerte.

43)El espíritu y el cuerpo serán reunidos otra vez en su perfecta forma; los miembros así como las coyunturas serán restaurados a su propia forma, tal como nos hallamos ahora; y seremos llevados ante Dios, conociendo tal como ahora conocemos, y tendremos un vivo recuerdo de toda nuestra culpa.

46)Ahora bien, cuando Amulek hubo hablado estas palabras, el pueblo comenzó a asombrarse en extremo otra vez, y Zeezrom empezó también a temblar. Y así terminaron las palabras de Amulek, o sea, esto es todo lo que he escrito.

44)Pues bien, esta restauración vendrá sobre todos, tanto viejos como jóvenes, esclavos así como libres, varones así como mujeres, malvados así como justos; y no se perderá ni un solo pelo de su cabeza, sino que todo será restablecido a su perfecta forma, o en el cuerpo, cual se encuentra ahora, y serán llevados a comparecer ante el tribunal de Cristo el Hijo, y Dios el Padre, y el Santo Espíritu, que son un Eterno Dios, para ser juzgados según sus obras, sean buenas o malas.

45)Ahora bien, he aquí, te he hablado concerniente a la muerte del cuerpo mortal y también acerca de la resurrección del cuerpo mortal. Te digo que este cuerpo terrenal se levanta como cuerpo inmortal, es decir, de la muerte, sí, de la primera muerte a vida, de modo que no pueden morir ya más; sus espíritus se unirán a sus cuerpos para no ser separados nunca más; por lo que esta unión se torna espiritual e inmortal, para no volver a ver corrupción.